En el marco de la celebración del “Día Mundial de los Humedales 2019”, cuyo lema de este año es “Humedales y cambio climático”, representantes de la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (Conanp) y de la Secretaría del Medio Ambiente de la Ciudad de México (Sedema), se reunieron en el Bosque de San Juan de Aragón, localizado al nororiente de la Ciudad de México, para conmemorar esta fecha y firmar un acuerdo de coordinación para impulsar acciones de conservación en Áreas Naturales Protegidas (ANP) y humedales de la CDMX.
Los titulares de la Conanp y la Sedema, Andrew Rhodes Espinoza y Marina Robles García, expresaron que este acuerdo de coordinación tiene el objetivo de implementar acciones y proyectos que contribuyan al fortalecimiento, manejo, protección, restauración y desarrollo sustentable de las ANP y Humedales de Importancia Internacional localizados dentro de la circunscripción territorial de la Ciudad de México.
Representantes de estas instituciones hicieron un llamado a la ciudadanía para generar consciencia sobre la importancia de estos ecosistemas y el vital papel que desempeñan en áreas urbanas. Por ejemplo, en 1992, el Sistema Lacustre Ejidos de Xochimilco y San Gregorio Atlapulco, por sus características fisiográficas y ambientales, fue decretado ANP de la CDMX. Más tarde, en 2014, fue incorporado a la Lista de Humedales de Importancia Internacional de la Convención de Ramsar.
Los humedales son zonas de transición entre ecosistemas acuáticos, marinos o continentales, y ecosistemas terrestres que poseen una baja profundidad, donde el suelo se inunda de forma permanente o estacional, dando lugar a hábitats con características acuáticas y terrestres. Los humedales urbanos son superficies terrestres que se inundan de agua y constituyen hábitats de vital importancia para poblaciones de peces y aves migratorias, pero sobre todo para la supervivencia humana debido a la gran variedad de servicios ambientales que proveen.
El Día Mundial de los Humedales es la ocasión perfecta para reconocer la importancia del trabajo conjunto y coordinado entre las instituciones gubernamentales, tanto a nivel federal como a nivel local, y fomentar la colaboración con las organizaciones de la sociedad civil, la academia y las comunidades locales en las tareas de conservación y protección del ambiente. Las redes conformadas por miembros del Comité Nacional de Humedales, donantes y agencias internacionales, son un gran ejemplo de que la transición hacia modelos de desarrollo sostenible es posible.
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