La Cruz Roja Mexicana dio a conocer que durante la marcha del 2 de octubre prestó 30 atenciones, dos traslados y una de sus unidades resultó dañada por grafiti.
Encapuchados lanzaron petardos a los elementos de la Secretaría de Seguridad Ciudadana que resguardaron la manifestación, quienes sólo se conformaron con apagar el fuego provocado por artefactos explosivos.
Por estos hechos, una mujer policía resultó lesionada debido a las heridas producidas por uno de los petardos. Ante ello, paramédicos la trasladaron a bordo de una ambulancia hacia el hospital.
Los embozados continúaron realizando pintas en las inmediaciones del Zócalo de la Ciudad de México, por lo que causaron disturbios y desmanes en calles como 20 de Noviembre, 5 de Mayo y Filomeno Mata.
A su paso rompieron puertas de cristal y de otros materiales. Algunos de ellos llevaban cadenas con las que amenazan a las fuerzas del orden y a personas que seguían la marcha pacíficamente rumbo a la Plaza de la Constitución.
Los inegrantes del llamado "cinturón de paz" tambien fueron agredidos, al grado que recibieron la orden de despojarse de su playera que los distinguia, y prácticamente correr por su vida.
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