Sin acuerdos y con endurecimiento de posturas del lado del gobierno y de la Policía Federal concluyó el cuarto día de protestas en el centro de mando CONTEL de la Alcaldía de Iztapalapa.
Por un lado, los policías federales que ya cansados de tantas horas y horas de espera y el incumplimiento de las autoridades de presentar este sábado el tabulador para las liquidaciones, exigieron que ahora la negociación se centre única y exclusivamente en el pago de indemnizaciones.
Los elementos inconformes señalaron en asamblea que ya no le interesa escuchar más opciones de trabajo por parte del gobierno federal, porque lo único que quieren es retirarse de manera digna, una vez que se extinga la Policía Federal en 18 meses.
Los efectivos pidieron al presidente Andrés Manuel López Obrador que si no sirven para la Guardia Nacional “porque son corruptos y están podridos” los indemnice.
Los policías federales establecieron un plazo fatal para escuchar la respuesta a sus demandas a las 14:30 horas, luego pasaron su exigencia para las 17:00 horas y posteriormente a las 22 horas, pero este ultimátum no tuvo eco ni en los jefes de División ni el subsecretario de Seguridad Pública, Ricardo Mejía Berdeja, quien encabeza la mesa de diálogo.
"¿Se dan cuenta que nuestros mandos no abandonan?, ¿Dónde están? Así como estamos siendo abandonados ahora, así nos abandonan en la función operativa.", lamentó el policía tercero; Adrián López Zamora.
La posición del gobierno es que hasta el próximo lunes se reanudarán las negociaciones a las 10 de la mañana y que será hasta entonces cuando se instalen las mesas de información donde los elementos recibirán orientación sobre cuánto dinero podrían recibir en caso de renunciar de manera voluntaria a la Policía Federal, ya que su lógica es que “nadie los está corriendo”.
De esta forma, los que decidan irse no recibirán liquidación y mucho menos indemnización, sólo podrán acceder a un finiquito.
Por la tarde, llegó al Centro de Mando CONTEL, el abogado Enrique Carpizo, asesor jurídico de los policías federales inconformes para exigir respeto a la integridad de los efectivos y llamar a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) para que intervenga ante la serie de acciones intimidatorias qué hay contra quienes participan en el movimiento, e incluso amenazas de muerte a una de las cabezas visibles de la protesta.
"Si no nos unimos el día de hoy en esta lucha, mañana será tarde, la razón es, si pierden ellos en sus derechos, perdemos todos en nuestros derechos, si eso les pasa a ellos que son fuerzas policiales, si eso les pasa a ellos que están del lado del gobierno, que están unidos, que han logrado tener este poder de convocatoria, ¿Qué cree que le pueda pasar a usted, a usted o a usted? que no tienen esa trascendencia", cuestionó.
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