
A pesar del mal tiempo que imperó en el Alto Golfo de California, hábitat de la vaquita marina, pescadores organizados cumplieron su amenaza y salieron a buscar el sustento para sus familias al iniciar la temporada de camarón.
Alrededor de 50 embarcaciones menores en el Golfo de Santa Clara, Sonora y siete en San Felipe, Baja California se hicieron a la mar con sus redes de enmalle tradicionales para regresar con entre 20 y 150 kilogramos de captura.
De esta forma, las cooperativas respondieron al silencio indolente de Semarnat, Sader, Inapesca y Conapesca, que después de nueve meses de gestión, no ofrecen opciones productivas a las comunidades, no levantan la veda en la región, ni reactivan el pago de compensaciones económicas.
De acuerdo con los líderes de las cooperativas, ninguna autoridad les impidió salir a pescar o realizó labores de vigilancia e inspección mientras desarrollaban sus actividades.
Añadir nuevo comentario